El médico deja plantado a Chuchín

por Esaú González

Pénjamo

El médico que iba atender a “Chuchín”, el menor de casi cuatro años que requiere el cambio de una válvula en su cerebro y atención médica para caminar no llegó a la cita. La medre del niño, estuvo puntual en el Centro de Salud de Pénjamo, pero el doctor no se presentó.

La ayuda que supuestamente se le iba a dar por parte de la Secretaría de Salud para atender y mejorar la calidad de vida de Jesús Bravo Medina del poblado de El Tlacuache, pareciera ser lenta y complicada.

Ayer miércoles, Carmen se levantó a las 6 de la mañana, despertó a su hijo, lo vistió y espero hasta las 7:15 horas en el camino por donde pasa el camión que la llevaría hasta Pénjamo. La mujer tenía que ser puntual, por que el médico que podría revisar al menor y canalizarlo a otro hospital le había dicho que iba a llegar a las 8:00 horas.

Carmen Medina, relató que estuvo alrededor de una hora y media esperando en las sillas que están frente a los consultorios, ahí permaneció sentada mientras esperaba a que le llamaran.

Paso el tiempo y una doctora que también da consulta en este hospital le dijo que no iba a llegar su médico, que volviera hasta el día siguiente a la misma hora, haber si ahora sí podían atender al menor.

Carmen dijo que llevaba algunos pañales y ropa que le habían obsequiado el fin de semana algunas personas para estar lista en el caso de que la envíen a León, donde presumiblemente le darían la cita a fin de iniciar con la atención de “Chuchín”.

La doctora llevó a la penjamense y al niño a la comunidad en la que viven, por que iba a dar una plática que correspondía al programa de Oportunidades.

Quiere caminar

Ya en El Tlacuache, Carmen y su hijo, dijeron que volverían a regresar por que al menos ella no ha perdido la esperanza de que “Chuchín” camine.

Luego de que el fin de semana algunos “héroes urbanos” llevaron obsequios a Bravo Medina, un par de zapatos le dieron una nueva ilusión, pues dijo Carmen que su hijo estaba muy contento de tener una cama nueva y en especial “nuevos pies”.

Chuchín creyó que al ponerse los zapatos iba a poder caminar, intentando bajarse de la cama sin lograrlo, “pensó que iba a caminar, pero no lo hizo; estaba muy feliz, pero se dio cuenta que no puede hacerlo”, puntualizó la mujer antes de acudir a una plática sobre adicciones.